"Las personas se miden por la soledad que soportan,
y la mía es mi mayor capital"

su magia no era ilimitada.


Cada vez que sentía cómo la magia se escurría entre sus dedos, los ojos se le llenaban de lágrimas y el berrinche le empapaba el pecho. Porque se estaba perdiendo a sí misma, lo mismo que las hadas perdían su polvo purpureo; sólo que ella no era un hada, y su magia no era ilimitada. Tarde o temprano se acabaría, se agotaría, y el chasquido de dedos pasaría a ser un triste gesto musical. ¿Y qué quedaría entonces? Absurdos juegos de manos, ilusiones vagas que no conseguirían llenarle el pecho con el calor que lo hacía la magia más pura; la misma que a veces se le escapaba en alguna sonrisa indebida y que al momento rectificaba por miedo. Y por miedo, precisamente por miedo, Marie se negaba a obrar magia: porque era preferible mantenerla escondida, antes que verla extinguirse y abandonar su cuerpo de niña. 



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Penúltima entrada de este mes, y principio del pequeño cuento que le estoy escribiendo a la pequeña de Marie. Que 21 añitos no se cumplen todos los días, y aunque sea todo muy ñoño, a veces me da por cosas así. Quizás termine subiéndolo entero, aunque de momento lo dudo.

Nada más, la próxima entrada será informativa, que se acerca un hiatus algo grande.

7 comentarios:

  1. Increíble, de verdad Elito, esto me ha encantado. Debe ser horrible poseer algo fantástico y no querer usarlo por miedo a que se agote y no poder volver a usarlo nunca más. De verdad, genial:)
    Un besito grande! <3

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  2. me ha encantado tus palabras magicas algo muy cierto pero en verdad es necesario ser adulta y dejar aquella niña saludos..

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  3. ¡Hola! penultima entrada? pero seguiras con el blog no? a ver que pasa en tu próxima entrada!
    ¡Un saludo!

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  4. Me encanta este texto y el diseño es genial.

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  5. Hay cosas que debemos dejar atrás, por mucho que nos duela. Así (de puta) es la vida.

    muá.

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  6. Brrrrrrrr. ¡Tenía que pasarme por aquí! (que hace tiempo que no puedo leerte). Cortito pero genial ^^ (y ojalá lo subas entero).

    ¡Un abrrrrazo calentito!

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