"Las personas se miden por la soledad que soportan,
y la mía es mi mayor capital"

XIV

Nunca me falló el instinto,
la llamada vibrante en el pecho,
el hormigueo incómodo en el vientre;
y entonces no fue menos.

Me hubiese rendido con ganas
a la clara imposibilidad del fenómeno,
pero se nos desvió la tangente.
Y ven tú a decirme que no son más que estupideces.

Niégame el hueco en tu cuello
o la sonrisa torcida (de mala manera).
Ven a callarme la boca y de paso
deshaz el nudo en la garganta.

Que yo fui la constante indebida
y tú el miedo (corrupto) innegable.
Que yo no me lancé al vacío, pero tú
te aseguraste que tampoco hubiese puente colgante.

Oportunidades no,
por favor.




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EDITADO:
Faltan 4 seguidores para los 50, y de verdad que estoy muy muy feliz por ello <3

1 comentario:

  1. ¡ Hola !
    Siempre merece la pena arriesgar por amor, aunque hay un miedo enorme, porque eso es lo que nos mueve y lo que nos mantiene vivos. Quien nunca ha sentido amor ( no solo como pareja, si no a su familia, a sus amigos, a sus ilusiones..) no puede ser humano.
    ¡ Un saludo !

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